jueves, 29 de julio de 2010

Dos meses en rojo



Ya desde el mes pasado y mi incursión por tercera vez a NL200, trajo aparejado un down que nunca había sufrido. Un mes en rojo.

Hasta ahi todo bien, es algo completamente estándar que cuando uno llega a niveles medios, y las cajas preflop vuelan, y las equity son aproximadas, la varianza hace el resto y nos deja en la lona o nos concibe un up para seguir reventando el nivel.

En Julio, había ya tomado bastantes medidas cautelares de los errores que estaba cometiendo, y proseguí a jugar como si nada hubiera pasado.

Terminando Julio, el down no termina y voy 3.5k abajo y el EV en 1k arriba, en donde ya 45 cajas de diferencia, empieza a molestar de sobremanera. Pero si realizamos los movimientos correctos, hay dos cosas que nunca deberíamos cambiar:

- Nuestro juego (si es ganador como ya lo he demostrado antes de mi nueva incursión a NL200 en 300k a 5bb en NL100 obviamente)
- El miedo a la varianza (no querer jugarse un flip o cosas similares, porque "obviamente" vamos a perder)

Si en estos dos puntos reforzamos el down, ya en algún momento la varianza deberá de mostrar misericordia, y devolvernos algo de lo que nos ha quitado. Y como siempre parafraseo a un buen colega del poker: "Para lograr superar el running bad cuando la varianza nos muestra su cara más tétrica, hay que jugar más para que los números se acomoden".

Asique habrá que volver a las raíces, a los leaks que uno comete (que cuando uno está de down, vuelven a aparecer), analizar los pot de más de 30bb que se haya perdido, e intentar dilucidar si estamos tomando las decisiones correctas o simplemente el down nos está llevando a jugar a lo regtard.

Si la segunda opción es un "si", pues bueno, a tomarse días de descanso que no queremos que el bank siga siendo agujereado.

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